Blogia
tugrace

Se va el verano en Cuba

Se va el verano en Cuba

Mucho mejor que otras veces

 

  • Con alegría y sudor, como empezó, millones de jóvenes cubanos dicen “hasta pronto” a los meses estivales y preparan sus mochilas para abrir el próximo 1 de Septiembre el Curso Escolar 2009 – 2010
  • Otros tantos se reincorporan a sus centros laborales y dejan atrás sus vacaciones, mientras la Isla entera sigue el mismo activismo de este tiempo necesario de descanso, con la diferencia de que ahora las calles y los poblados se llenarán de pueblo desde el amanecer.
  • Fue mucho mejor este verano en Cuba, al margen de que el pasado 2008 estuvo bien marcado por los fenómenos meteorológicos. Hay coincidencia de jóvenes y no, en que se organizó con más visión que otras veces en todos los sentidos y a todos los niveles estatales.

 

Por Graciela Guerrero Garay   Foto: Lloansy Dïaz Guerrero

 

 

Cuando escribo estas líneas cientos de jóvenes en todo el país están bailando. Se despide un verano mejor organizado centralmente y con mayor visión de lo que quiere y necesita el cubano para sus momentos de descanso. Es casi ya, el amanecer del domingo 30 de agosto.

 

 

Dentro de unas horas, la cita será en el surco para terminar como empezaron, con una jornada de trabajo voluntario que garantice la cosecha del invierno. Y luego, en la tarde y la noche, el encuentro sucederá nuevamente en las áreas recreativas habilitadas por la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) para la sana recreación juvenil del verano 2009.

 

 

En este oriental territorio de Las Tunas, Balcón del Oriente Cubano, las opiniones son muy favorables. Para jóvenes y adolescentes, el espacio abierto de manera permanente por la UJC en el Parque de la Revolución 26 de Julio, a escasos metros del centro urbano de esta ciudad, ha estado mucho mejor que en otros veranos y “muchísimo” que la cotidianidad, donde cada fin de semana abre sus puertas con ofertas culturales, recreativas y gastronómicas.

 

 

Bailar es el fuerte y la música preferida en estos tiempos de “Reguetón y Casino” nunca faltó, como tampoco la manera tranquila de adquirir un refrigerio. La lectura, con la venta de libros y el Festival del Libro y la Literatura marcaron la diferencia para quienes quisieron guardar de recuerdo del 2009 un buen texto, la firma de los escritores locales o la memoria de una charla culta e instructiva.

 

 

Mientras la generación más joven se movía entre estas opciones, las más buscadas y preferidas, hubo teatro, artes plásticas, décima, encuentros deportivos, competencias de habilidades, guitarra, dibujo, guateques, viajes a la playa, fines de semana en el conocido Campismo Popular, disfrute de los ríos y esa frescura natural que tanta falta hizo ante el sofocante sol y calor perenne, y visitas a sitios históricos, museos y galerías de arte.

 

 

Todo ello lo disfrutó la familia tunera y lo que más se agradeció fue que los precios y las posibilidades del pasaje estuvieron al alcance de todos, y con una organización y sistematicidad  muy pocas veces lograda en veranos anteriores, no exactamente el pasado donde la isla entera estaba agobiada por el paso de los ciclones y se vivieron días de angustia y continuado esfuerzo.

 

 

Otro detalle que se lleva las palmas es que los cubanos, aún bajo un austero régimen de ahorro energético, no sufrió esas largas y continuas afectaciones en el fluido eléctrico, independientemente de que en determinados momentos faltó la electricidad en el sector residencial y muchos centros de trabajo y servicios fueron sacados del sistema, por no cumplir los planes de ahorro y eficiencia planificados y debidamente coordinados.

 

 

En el orden social primó una mayor disciplina, la canasta alimentaria no sufrió alteraciones y, como hacia ya mucho tiempo, las viandas y hortalizas, sobre todo el plátano macho que tanto gusta al cubano y al oriental, estuvieron y aún están abundantes, a lo que se suman varias ferias de ventas de productos agropecuarios, incluido cárnicos, que resaltaron por su calidad y accesibilidad para el bolsillo del ciudadano común y de menos ingresos económicos.

 

 

Fue un buen verano, aún cuando no siempre llegó el esparcimiento ni la mano estatal a las comunidades más lejanas de los centros urbanos, se pudieron multiplicar las iniciativas allí donde la población es poca y rural y quedó la lección de que en las municipalidades tuneras, no todas con el mismo desarrollo demográfico ni social, se debe trabajar, cohesionar más los talentos y las potencialidades en recursos y apoyo gubernamental para extender y llevar a los jóvenes y población muchas de las ofertas que, este 2009, hicieron coincidir en criterio a los capitalinos en que fue superior y bien aprovechado.

 

 

Tal como se aprovechará en toda Cuba esta jornada productiva, donde sudor y alegría andarán de manos, definiendo una vez más esa identidad tan caribeña y criolla que hace de cubanas y cubanos seres especiales, solidarios y decididos siempre a dar más contra viento y marea en su inmensa mayoría. 

0 comentarios